Algunas veces la incertidumbre ronda mi mente y surgen las preguntas: ¿lo estoy haciendo bien? ¿cómo puedo mejorar? Mis hijos crecen y se enfrentan a un mundo que avanza a gran velocidad. ¿Estarán preparados para lo que viene? ¿Tendrán las herramientas adecuadas para tener un buen futuro?
Estas son las reflexiones de una mamá sobre la educación, no sé si compartes estas inquietudes, ni siquiera sé si alguien será tan amable de leer estas líneas y dejar un comentario al final, solo se que hoy las dudas surgen al por mayor. Tengo la fortuna de recibir comentarios positivos por parte de las y los lectores que visitan este humilde espacio, también me han preguntado cosas que todavía no me siento con la capacidad de responder. Este sitio solo intenta ser un espacio de comunicación entre mamás que quieren lo mejor para sus hijos, pero ¿qué es lo mejor?
Reflexiones de una mamá sobre la educación
La siguiente es una lista de lo que me gustaría que mis hijos aprendieran, de lo que quisiera que mis hijos logren en la vida. A ver si con esto me doy una idea de por dónde continuar con su educación.
Lo que quiero que mis hijos aprendan:
- Amarse a sí mismo: quiero que mis hijos se amen, aunque suene a cliché, porque allá afuera hay personas que les pueden hacer mucho daño si ellos no se aman.
- Amar a los demás: claro, la lección anterior no tiene sentido si no aman a los demás, incluidos animales y naturaleza. ¿Qué sentido tiene que saquen 10 en matemáticas si no pueden llevarse bien con sus compañeros del salón?
- Respeto: el respetar a los demás es un asunto complicado. A veces parece que las personas no son dignas de respeto. Pero quiero que mis hijos respeten a los demás, que sean tolerantes con las ideas de los otros, que se den cuenta que sus ideas no son las únicas ni las mejores.
- Comunicación: hoy en día podemos comunicarnos con seres que viven al otro lado del mundo. Pero eso no significa que estamos listos para comunicarnos con los demás. Hablamos sin decir lo que realmente pensamos, oímos sin escuchar, leemos sin comprender.
- A controlar sus emociones, bueno más que a controlarlas a gestionarlas, aprovechar todo el beneficio de ser un ser emocional, pero sin dejar que sus arrebatos los lleven a tomar decisiones equivocadas.
- A resolver problemas y buscar soluciones. No quiero que conozcan la respuesta correcta porque la respuesta correcta pocas veces soluciona un conflicto en la vida real, quiero que busquen soluciones sin rendirse.
- A levantarse después de cada fracaso: los fracasos existen, pero cada quien elige cómo reacciona a ellos. Te puedes quedar ahí, tirado para siempre, o puedes levantarte y luchar de nuevo.
- A soñar: que nunca pierdan esa capacidad que tienen hoy de soñar y de creer en un mundo mejor.
- Que la magia existe, a veces se presenta en la forma de un libro, a veces llega en la sonrisa de un amigo, otras veces se esconde detrás de una lágrima de tristeza, pero la magia existe.
- A disfrutar el presente: es lo único que tenemos, este momento en el que tecleo sobre la computadora pasa muy rápido, pero disfruto cada segundo al ver las palabras que se van formando, al poner mis pensamientos en una pantalla blanca. Quiero disfrutar con ellos el presente y que ellos lo disfruten también porque si viven con intensidad cada segundo de su vida habrán vivido a plenitud.
Y ya poniéndome en plan soñador, me gustaría que cuando mis hijos crezcan sean:
♥Felices ♥Creativos ♥Risueños ♥Soñadores ♥Idealistas ♥Entusiastas ♥Eternos aprendices ♥Propositivos ♥Inspiradores
Y después de esto me pregunto ¿en la escuela van a desarrollar esas aptitudes? ¿van a aprender a soñar dentro de un aula? ¿van a aprender a luchar por lo creen en un sitio que les dice que la respuesta es una sola y que no hay más opciones?
No estoy en contra de la educación, para nada, y de niña me gustó mucho la escuela, pero creo que siempre me porté muy bien, que siempre hice lo que se esperaba de mí, no me arrepiento de lo que he hecho, pero si quiero hacer todo aquello que no pude hacer por seguir las reglas de la sociedad.
Hoy las respuestas están en Google, mis hijos saben que no necesitan aprender un dato de memoria porque en Google lo encuentran cuando lo necesitan, pero sus propuestas, sus ideas, sus acciones, su corazón y su mente no están en internet y espero que nunca lo estén. Hoy en día la tecnología puede hacer muchas cosas por nosotros y por eso hoy más que nunca necesitamos SER humanos. Y fomentar todas esas cualidades que nos hacen únicos.
Si haz leído hasta aquí realmente lo aprecio y me gustaría mucho conocer tu opinión. Deja un comentario, comparte este artículo en tu red social favorita, gracias por ser parte de esta comunidad. ¿Y tú qué quieres para tus hijos?